La Universidad Católica del Maule obtuvo un certificado de propiedad intelectual para un indicador de sensibilidad tumoral, desarrollado por investigadores de su Facultad de Medicina.
La Universidad Católica del Maule (UCM) obtuvo una patente de invención para un biomarcador de sensibilidad tumoral a la terapia radiológica y quimioterapia, desarrollado por investigadores de la Facultad de Medicina del plantel.
El marcador, definido como una característica capaz de medir objetivamente procesos biológicos normales o patogénicos, fue detectado por los doctores Armando Rojas, Ileana González y Erik Morales.
“El biomarcador es una proteína conocida como RAGE y puede predecir el éxito de la quimioterapia o la radioterapia. Cuantificamos el biomarcador por técnicas de inmunohistoquímica por fluorescencia, en biopsias de diagnósticos de tumores de cáncer gástrico y colorrectal, de alta prevalencia en el país”, sostuvo Rojas, quien estudia el indicador desde el 2013, en el marco de un proyecto que se adjudicó ante el Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, Fondecyt.
“La novedad de este biomarcador es que se trata de una proteína que había sido descrita en la membrana de la célula y que en el marco de esa investigación del 2013, que era un estudio en pacientes infectados por la bacteria Helicobacter pylori, se detectó que la proteína también se localizaba en el núcleo de la célula (…). Posteriormente un grupo alemán publicó, haciendo referencia a nuestro trabajo, que cuando la proteína alcanza el núcleo forma un complejo con otras proteínas que están vinculadas a la reparación del ADN”, precisó el también director del Laboratorio de Investigaciones Biomédicas de la UCM.
“Entonces empezamos a hacer estudios in vitro, para posteriormente y bajo el financiamiento de un proyecto del Fondo de Innovación y Competitividad del Gobierno Regional del Maule, FIC, procedimos a visualizar los niveles de expresión de este biomarcador en el núcleo de células de biopsias de pacientes con cáncer gástrico o colorrectal, que iban a ser sometidos a quimioterapia neo-adyuvante. Y lo que hemos encontrado es que la cuantía o intensidad de RAGE en el núcleo se correlaciona con la sobrevida de los pacientes que han sido sometidos a quimioterapia. Mientras más intensa es la localización nuclear, mayor capacidad tiene la célula tumoral de reparar las lesiones que inducen los fármacos y, por lo tanto, de generar un mecanismo de resistencia y sobrevivir al tratamiento quimioterapéutico”, explicó el académico.
Reconocimiento a la trayectoria
Erika Leiva, decana (s) de la Facultad de Medicina del centro educativo, destacó que el certificado concedido por el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) -correspondiente al primero otorgado a la unidad en sus 18 años de historia- representa un reconocimiento al crecimiento institucional.
“Esta patente nos permitirá contribuir de manera concreta y significativa a optimizar la terapia de cáncer con menor inversión de recursos tanto clínicos como hospitalarios. En estos tiempos post pandemia en que el cáncer predomina como primera causa de muerte en Chile y en un sector territorial donde fuertemente afecta esta enfermedad, se suma al desarrollo del Centro Oncológico de la Facultad de Medicina, la incorporación de temáticas asociadas a esta patología a través de la docencia, la investigación que se desarrolla en el proyecto MAUCO en Molina y la formación de capital humano avanzado en el área oncológica con la subespecialidad de Oncología Médica que imparte nuestra institución”, resaltó.
A la fecha, la universidad ha patentado cinco inventos en Chile y el extranjero. Tres de ellos -una hamburguesa con cerezas, un dispositivo móvil de identificación masiva y ahora el marcador biológico- recibieron su certificado de propiedad intelectual este año.
“Siempre estamos incentivando (…) la necesidad de proteger las capacidades de invención en la UCM. Es por lo que estamos muy satisfechos con la obtención de la primera patente del área de medicina en nuestra universidad, considerando que los procesos de solicitud de patente y protección en estas áreas son extensos, pero con la buena disposición de los académicos investigadores podemos alcanzar los resultados esperados”, aseveró la directora de Innovación, Desarrollo y Transferencia Tecnológica del plantel, Fabiola Loyola.
Crédito: Vicerrectoría de Investigación y Postgrado UCM.