La unidad al alero de la Vicerrectoría de Investigación y Postgrado del plantel, gestionó el primer contrato tecnológico con empresas ligadas a la agroindustria.
Con la firma del rector de la Universidad Católica del Maule, Dr. Diego Durán, se dio vida en abril, al primer contrato tecnológico gestionado por la Oficina de Transferencia y Licenciamiento Tecnológico (OTL) del plantel, proyecto que da cuenta de la I+D (investigación y desarrollo) que será utilizada por las empresas Copefrut y QC Inspec SpA, para impactar positivamente en su productividad.
La OTL-UCM tiene como misión acercar la investigación realizada en la Universidad, de tal manera que sea transferida a las empresas, con la finalidad de que se concrete en proyectos y acciones que aporten al desarrollo de la región y el país.
Satisfacción
Como un proceso de sinergia profesional muy valiosa, ha sido considerado este acontecimiento. En voz de la directora OTL-UCM, Fabiola Loyola, el contrato logrado “es un hito relevante, ya que fortalece nuestros vínculos directos con la industria, mediante la entrega de una asesoría técnica y tecnológica, desde académicos de nuestra Universidad hacia empresas regionales”.
Durante los años de funcionamiento de la OTL-UCM, se ha generado contacto permanente con los académicos, quienes ya conocen las funciones y prestaciones que pueden recibir de parte de esta oficina. “Esto ha permitido crear confianzas para gestionar a través de nosotros, trabajos conjuntos con empresas”, enfatizó Loyola, quien agregó que “se ha permitido formalizar estas vinculaciones, a través de estructuras de contratos tecnológicos para trabajar entre académicos y la industria”.
Aporte regional
Para Claudio Fredes, académico de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales –quien desarrolla la iniciativa junto a su colega de facultad Dra. Evelyn Villagra, Dr. Marco Mora de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería y los estudiantes del laboratorio, Manuel Wilson y Gabriel Delgadillo-, el apoyo y asesoría brindado por la OTL-UCM en este proyecto “fue clave, decisivo e imprescindible. Sin su trabajo nosotros no podríamos haber alcanzado este contrato. Fue una ayuda precisa, en el momento indicado”.
Para entender el proyecto -desarrollado en el Laboratorio de Investigaciones Tecnológicas en Reconocimiento de Patrones (LITRP)-, Fredes explicó que “la empresa tenía una necesidad clave para su desarrollo, el control de la calidad de la fruta, a nivel de recepción en el packing. Este proceso no existía o era muy lento y subjetivo”. El investigador agregó que “fue ahí donde entramos nosotros con nuestra línea. Son métodos no destructivos para la evaluación de la madurez de la fruta. Con ese problema, llegamos a acuerdo con la empresa para investigar este tema, aplicando la objetividad y la ciencia, con la última tecnología disponible”.
Los resultados de la investigación de este problema -en voz de Claudio Fredes-, han sido exitosos, pudiendose hacer realidad gracias al aprendizaje y equipamiento obtenidos en dos proyectos adjudicados por Fondef al laboratorio. “Estamos bastante contentos porque el modelo de estimación ha sido positivo y a partir de ello estamos estudiando como aterrizar esto en un prototipo -hardware y software-, de costo razonable, para ser implementado en los diferentes puntos de acopio”, finalizó.