Una fuerte contradicción entre los valores que promueve la formación ciudadana en las escuelas y la normalización de la violencia, dejó al descubierto una investigación que realizó una candidata a doctora en la Universidad Católica del Maule.
Las violaciones a los Derechos Humanos durante la última dictadura en Chile, siguen en las sombras dentro de los liceos, según detectó una investigación realizada por una candidata a doctora de la UCM.
“Indagamos cómo el profesorado aborda la complejidad del periodo histórico de la dictadura cívico militar en la escuela, considerando que convive con una contradicción, de acuerdo a los hallazgos de esta investigación, entre el discurso educativo que promueve la formación de futuras generaciones en torno a los valores democráticos y el respeto por los Derechos Humanos y un discurso social que permanentemente silencia o minimiza esta parte de la Historia y normaliza ciertas formas de violencia en la sociedad”, explicó Karina Carrasco, quien defendió con éxito su tesis ante una comisión del Doctorado de Educación en Consorcio, que la Universidad Católica del Maule imparte junto a tres plantes de Concepción y Temuco.
“El discurso del profesorado refleja contradicciones. En el aula podemos reforzar los valores democráticos, pero esto se ve contrarrestado en los espacios comunes, como el patio o la sala de profesores, donde encontramos dinámicas que evidencian una visión negativa sobre la política, el temor al disenso (…) y dificultades para desarrollar formas de diálogo coherentes con los Derechos Humanos y la democracia”, precisó Carrasco.
“La normalización de la violencia -agregó- es evidente si observamos la realidad. Tenemos, por ejemplo, expresiones culturales que legitiman la violencia de género, discursos que van en contra de la migración y la presencia mundial de dos guerras. Entonces, se hace normal que estas cosas pasen, porque hay otro que es más débil o peligroso”, afirmó.
El tabú de la ex Colonia Dignidad
Carrasco, licenciada en Historia y Educación, recogió datos entre los docentes por medio de entrevistas. Una de las preguntas giró en torno a la ex Colonia Dignidad, un asentamiento de colonos alemanes ubicado cerca de Parral, que funcionó como centro represivo de la dictadura de Augusto Pinochet.
“Hubo profesores que dijeron que era imposible abordar ese tema en sus escuelas, por la cercanía geográfica del caso y porque existe un temor muy grande hacia las temáticas políticas, que son consideradas tabú. Algunos sienten resquemores o son muy cuidadosos en integrar, por ejemplo, a las víctimas sexuales de la ex colonia”, manifestó.
Para la ahora doctora, resulta fundamental reforzar la llamada “empatía histórica”, como la capacidad de los estudiantes “de comprender el momento histórico en el cual las personas viven determinadas experiencias”.
“El profesorado dice que es más fácil para un familiar de una víctima de la dictadura empatizar con otro que le pasó algo similar. Pero cuando no hay una cercanía con la experiencia o cuando la visión política es totalmente contraria, existe una mayor indiferencia frente a las vivencias o relatos. En este último caso, es mucho más difícil comprender esa realidad y el esfuerzo requerido es mucho mayor”, aseveró.
Crédito: Vicerrectoría de Investigación y Postgrado UCM.